Caracas.- El Dinamo de Kiev se impuso este martes 3-1 en casa del Borussia Moenchengladbach, en un encuentro en que el venezolano Juan Arango realizó una asistencia.
El venezolano tuvo un infeliz debut en competiciones europeas en el abarrotado Borussia Park, aunque en lo personal tuvo un buen partido.
Pese a madrugar a su rival en el marcador, el conjunto alemán tuvo una tarde negra en la que le salió mal todo aquello que pudo salirle mal y careció del empuje necesario para evitar que el once ucraniano le diera vuelta al marcador.
Las acciones tuvieron un arranque prometedor para el ‘Gladbach que nada más al minuto 13 tomó la ventaja en el marcador.
Arango se inventó un cambio de banda desde la derecha que fue bajado por el finlandés Alexander Ring, quien eludió a un marcador y definió al primer palo del portero para el 1-0.
El inicio hizo soñar a los hinchas renanos, el cuadro de Arango se adelantaba pese a no haber sido más que su rival, pero a partir de ese momento el partido cambió de rumbo.
El Dinamo de Kiev se encontró con el empate al ’28 por medio de un remate desde unos 25 metros de distancia de Taras Mykhalyk que se desvió en la rodilla del capitán del ‘Gladbach Filip Daems.
Sin haber asimilado el empate, el local recibió el segundo. Un pérdida de balón infantil en el mediocampo derivó en gol de Andriy Yarmolenko tras recibir una buena habilitación y driblar al español Álvaro Dominguez.
Tras el descanso, el ‘Gladbach adelantó un poco más sus líneas pero el Dinamo se apertrechó y apostó por bajarle intensidad a las acciones.
El Dinamo, equipo con la mayor cantidad de ligas de la extinta Unión Soviética y del balompié ucraniano, hizo valer su mayor aplomo y experiencia que el nobel equipo alemán.
El capitán vinotinto se mostró activo durante todo el partido, se cambió varias veces de la banda izquierda a la derecha y envió centros y balones largos que nunca fueron capitalizados.
Arango incluso generó una ocasión por su cuenta al rematar un balón desde fuera del área, pero el portero del cuadro ucraniano repelió el disparo.
En la recta final del partido, la suerte volvió a sonreírle al Dinamo. Al ’81, un tiro libre se desvió en De Jong e ingresó en su propio arco. Era el 3-1 definitivo y el cierre de una noche para el olvido del tulipán.
Juan Arango había expresado en varias ocasiones en la temporada pasada que soñaba con jugar una Liga de Campeones, pero esta caída como local prácticamente le cierra la puerta al cuadro prusiano.
Las posibilidades del ‘Gladbach de avanzar a la fase de grupos pasan por vencer por tres o más goles en el difícil estadio olímpico de Kiev, ganar por dos o más goles siempre que el marcador sea mayor a 4-2 o vencer en los penales tras imponerse 3-1 en el tiempo regular.
El cuadro es bastante delicado para el Borussia Moenchengladbach. Tras el contundente e inesperado revés como local, el ‘Gladbach tendrá que buscar un auténtico milagro en tierras ucranianas.
Redacción